Huanchaco fue escenario del IV Congreso de Surf Regenerativo, un encuentro organizado por Waves Lobitos y Waves Internacional, que reunió iniciativas locales, regionales e internacionales comprometidas con la conservación y el desarrollo comunitario. Durante cuatro días, organizaciones, líderes comunitarios, investigadores y emprendedores compartieron experiencias sobre cómo el surf impulsa bienestar social y salud mental, así como es un aliado para la conservación de rompientes.
En este espacio, la regeneración se entiende como una forma de aportar al bienestar común: cuidar los lugares que habitamos temporalmente y colaborar con las personas con quienes los compartimos. Con ese enfoque, se desarrollaron actividades orientadas al fortalecimiento de capacidades y a la mejora de espacios públicos que sostienen el ecosistema costero.
Uno de los hitos del encuentro fue la capacitación oficial de Waves for Change, referente mundial en Surf Therapy, que formó y certificó gratuitamente a los participantes. Su metodología, que usa el surf para fortalecer la resiliencia, la autoestima y el bienestar emocional en jóvenes, se convirtió en un eje central del congreso.
En ese mismo marco, se presentó el proyecto “Ampliación de los beneficios de la economía azul y la conservación de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos críticos mediante la gestión de los ecosistemas de surf”, financiado por el Global Environment Facility (GEF), implementado por ONUDI y ejecutado por Conservación Internacional y la SPDA, junto a Save The Waves Coalition.
El caso de Huanchaco, ola protegida por Ley de Rompientes gracias a la campaña HAZla por tu ola y Reserva Mundial de Surf por Save the Wave Coalition, permitió ejemplificar cómo las olas, su cultura ancestral con los caballitos de totora y su actividad económica forman un ecosistema que requiere gestión, seguimiento y participación comunitaria.
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La iniciativa de la SPDA, Conservamos por Naturaleza, organizó diversas actividades. El cine ambiental Kuyapanakuy presentó dos funciones con películas y proyectos inspiradores que exploraron la relación entre el océano, la cultura costera y la importancia de conservar tradiciones vinculadas a la naturaleza.
Asimismo, se desarrollaron talleres de herramientas legales dirigidos a pescadores artesanales y escuelas de surf, centrados en derechos ambientales y participación ciudadana, lo que permitió fortalecer capacidades locales. Finalmente, se realizaron limpiezas de playa que promovieron la acción colectiva y el cuidado del ecosistema costero.

Foto: SPDA
El congreso concluyó reafirmando su rol como un espacio de articulación internacional, donde comunidades costeras, iniciativas locales y nacionales, organizaciones de distintos países y proyectos de conservación convergen para situar al surf y a los ecosistemas que lo sostienen en el centro de una agenda regenerativa compartida.