La experiencia comunitaria en la promoción para el establecimiento de la Reserva Nacional Mar Tropical de Grau fue destacada en el pabellón Perú de la COP 16, que se desarrolla en la ciudad de Cali. El evento paralelo “Mar Tropical de Grau, un sitio de esperanza”, fue organizado por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado de Perú (Sernanp), GIZ, The Nature Conservancy Perú y la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA).
Ubicada en cuatro zonas marinas frente a las costas de Piura y Tumbes, regiones del norte del Perú, Mar Tropical de Grau alberga el 70% de especies marinas de todo el país. El Ñuro (Piura), uno de los espacios que conforman la reserva, es una comunidad de pescadores artesanales mantiene el uso tradicional de artes de pesca que permiten hacer una actividad más sostenible con el ecosistema.
“No es fácil ingresar al mar, es una profesión de mucho riesgo, pero en él convivimos”, sostuvo Marcelino Gonzáles, presidente del Gremio de Pescadores Artesanales de El Ñuro, quien junto a sus compañeros de labores y su comunidad, participaron de la promoción activa para la conservación de esta zona. “Es un trabajo conjunto con Sernanp y todos los entes competentes, porque unidos lograremos el objetivo de que sea una verdadera Reserva Nacional de Mar Tropical en beneficio de todos los pescadores artesanales”, destacó Gonzáles.
La participación de los pescadores artesanales y ancestrales de El Ñuro fue clave para el establecimiento de la Reserva Nacional Mar Tropical de Grau.
Para el Perú, el establecimiento de esta reserva aporta a la implementación de la Iniciativa 30x30, acordada durante la COP15 de 2022. Este acuerdo busca que cada país conserve, al menos, el 30 % de sus territorios marinos y continentales bajo un esquema de protección.
Por su parte, José Carlos Nieto, jefe del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), resaltó que “no es solo proteger lo que tenemos en el mar peruano, si no es generar la conectividad con otras especies que hay en esta región del mundo y que transitan por el Perú, como es el caso de las ballenas que llegan a tener sus ballenatos”.
Desde Perú, se reportó también que las caletas de Paita, La Islilla, Tortuga, El Ñuro, Los Órganos, Cabo Blanco, Canoas y Punta Sal, siguieron con entusiasmo el evento a través de la transmisión en vivo realizada por el Ministerio del Ambiente.
Este evento contó también con una mesa de especialistas conformada por Marta Cecilia Diaz, subdirectora de Gestión y Manejo de Áreas Protegidas de Parques Nacionales de Colombia; Stefanie Torres, presidenta de SOA Perú y Jimpson Dávila, gerente de Conservación Marina de la Sociedad Peruana de Derecho ambiental (SPDA); con la moderación de Marco Ruiz Serkovic, coordinador del proyecto BAF:Mar 2025 - The Nature Conservancy Perú.
Entre los retos que afrontan áreas como estas, aparece la gestión en coordinación con las comunidades costeras, mientras que “en temas oceánicos se requiere una gran apuesta en términos tecnológicos, frente a actividades ilegales y en coordinación con las autoridades para trabajar en conjunto”, señaló Díaz desde la experiencia colombiana.
Países como Ecuador, Colombia, Costa Rica y Perú, comparten la ecorregión marina de Guayaquil, a la cual también pertenece el Mar Tropical de Grau, así lo explicó Ruiz Serkovic. “Por ello, es fundamental generar alianzas entre naciones para mejorar la gestión de especies como las ballenas jorobadas. En ese sentido, el intercambio de experiencias entre países se presenta como una oportunidad para colaborar y contribuir a una gestión más efectiva del área marina", afirmó.
Durante los dos últimos años, representantes de las autoridades a cargo de la gestión de las áreas marinas protegidas de Perú y Costa Rica sostuvieron una serie de encuentros para intercambiar experiencias en su trabajo. Esta interacción se traduce en la publicación “Retos para la gestión de áreas de conservación marino-costeras. Intercambio de experiencias Perú-Costa Rica”, que fue presentada durante el panel.
Además, se destacó la iniciativa colectiva por contribuir a la protección de más áreas protegidas. “Es gracias al esfuerzo sostenido que ha tenido la ciudadanía para que esto sea posible, por ejemplo, Mónica Alzamora, que ya no está presente, pero que junto a los pescadores piuranos han cumplido un rol para concretizar los objetivos de la conservación marina en el Perú”, apuntó Jimpson Dávila, gerente de Conservación Marina de la SPDA.
En este evento paralelo se estrenó el corto documental “Guardianes de las 5 millas: Mar Tropical de Grau”, en el que un equipo de producción se suma a la faena de pesca de merluza (Merluccius gayi) de la mano del pescador Martín Bayona, en la Reserva Nacional Mar Tropical de Grau, perteneciente a El Ñuro.
Con tomas inéditas del trabajo de los pescadores artesanales de esta zona, se relata un día de trabajo y la importancia de conservar un espacio como este. El video podrá ser visto próximamente en el canal de YouTube de la SPDA.