Los TamboPatas vigilan cerca del 80% de una zona compuesta por 230 mil hectáreas y en la que viven más de 1500 familias. Desde su conformación, en 2001, este grupo ha participado en el reconocimiento de las primeras cuatro Áreas de Conservación Privada (ACP), en Madre de Dios, ubicadas en el Corredor Bajo Tambopata– Isuyama. En 2016, la National Geographic reconoció su labor a través de la figura de su presidente Víctor Zambrano, premiado como Héroe de la conservación.
Junto a la SPDA, el comité ha implementado la plataforma virtual Alerta Ambiental para el monitoreo ciudadano de denuncias ambientales con asistencia legal gratuita, así como la instalación de radares en las copas de los árboles, los cuales fueron creados con celulares reciclados, y que transmiten ondas en un radio de acción de medio kilómetro, lo que a su vez permite la detección de ruido y envío de coordenadas exactas a las autoridades.
En 2019, el Ministerio del Ambiente otorgó a la SPDA el Premio Nacional Ambiental por su campaña en apoyo a los TamboPatas. Con las donaciones obtenidas, el grupo podría optimizar sus labores de monitoreo a actividades ilícitas, así como brindar acompañamiento legal a los afectados por la minería ilegal. A esto se sumarían dos mejoras: el incremento de la presencia del Estado en la Reserva Nacional de Tambopata y su zona de amortiguamiento, así como la movilización de autoridades para el allanamiento de operaciones de minería y tala ilegal.
Otros de los ejes que forman parte de esta campaña son el de educación ambiental, enfocado en grupos de interés de la zona para que conozcan sus derechos y valoren la protección de la naturaleza, al igual que la asesoría a vecinos y productores locales para la incursión en alternativas ambientalmente sostenibles. Sin duda, puntos importantes en la conservación de este gran tesoro llamado Tambopata y que convierte a sus integrantes en actores trascendentales en la preservación de la Amazonía peruana.