Más de 30 representantes de los Comités de Gestión de Áreas Naturales Protegidas de diversas partes del Perú participaron en la socialización de los aprendizajes, desafíos y propuestas recogidas en Rimay, un espacio de diálogo que se desarrolló este año en Loreto, Cusco, Piura y Áncash.
La experiencia de Rimay, que en quechua significa dialogar, se llevó a cabo a través de cuatro talleres macrorregionales entre mayo y julio de 2025, con la participación de 109 actores provenientes de 29 Áreas Naturales Protegidas (ANP), tanto nacionales como regionales. Esta amplia convocatoria refleja la diversidad que convive en el sistema nacional de áreas naturales protegidas en el país.
El evento “Voces y territorios: Construyendo gobernanza desde las macrorregionales de Rimay” fue organizado por la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA) con el apoyo del proyecto “Inclusión Ahora: una mirada intercultural de nuestro patrimonio natural”, financiado por la Fundación Gordon and Betty Moore. El encuentro reunió a representantes del Estado peruano, organizaciones de la sociedad civil y miembros de los Comités de Gestión quienes discutieron los resultados de dicho proceso participativo.
Durante su intervención, Silvana Baldovino, directora del Programa de Biodiversidad y Pueblos Indígenas de la SPDA destacó la importancia de la articulación a lo largo del proceso Rimay. “Ha sido una muestra clara de lo que el trabajo articulado por un objetivo común puede lograr”, subrayó. “Tenemos una experiencia muy amplia recogida y ahora la idea es ver cómo a partir de eso podemos seguir mejorando la participación de los actores de los Comité de Gestión y fortalecer el rol de las ANP en el territorio”, agregó.
Aunque la presencia masculina fue mayoritaria, las mujeres alcanzaron un 40,4% de participación, consolidando un avance significativo en la equidad de género. Asimismo, el proceso tuvo un carácter intergeneracional, con un rango de edad predominante entre 31 y 40 años y más del 45% de participantes mayores de 41 años. Los jóvenes, entre 18 y 30 años, representaron el 11,1% del total.
Foto: Wuilmar Briceño / SPDA
Al respecto, Baldovino resaltó esos avances en inclusión y equidad de género dentro de dichos procesos. “Hemos avanzado mucho en el involucramiento de las mujeres en la gestión de las ANP y lo mismo con la participación de jóvenes y la transmisión de conocimiento entre generaciones”, indicó. “Sin embargo, la interculturalidad y el género son temas que deben abordarse en todo el sistema de áreas”.
Los talleres de Rimay permitieron identificar 54 problemas comunes que enfrentan los Comités de Gestión y 54 soluciones propuestas desde los territorios. Entre las principales barreras, los participantes destacan la falta de personería jurídica y de presupuesto propio y las limitaciones en la articulación con gobiernos regionales y locales. También subrayan la urgencia de reforzar la seguridad de los miembros de los comités ante amenazas derivadas de actividades ilegales.
“El desarrollo del país es prioritario pero la conservación también. Es necesario que todos nosotros hagamos un esfuerzo con el Ministerio del Ambiente para poder encontrar soluciones a estos graves problemas que se están dando y se van a seguir dando”, aseguró durante el encuentro Ricardo Guersi, presidente del Comité de Gestión de la Reserva Nacional Sistema de Islas, Islotes y Puntas Guaneras.
Por su parte, Mariluz Romero, vicepresidenta del Comité de Gestión del Parque Nacional Huascarán, remarcó la importancia de este tipo de encuentros. “Sin estos espacios seguiríamos pensando que los cambios se logran de un día para otro”, afirmó. “A corto plazo debemos plantearnos estrategias para que se vayan concretando nuestras propuestas. No estamos cerrando esta etapa, sino abriendo una nueva para pensar ya en estrategias”.
Asimismo, Mercedes Perales, expresidenta del Comité de Gestión del Parque Nacional Alto Purús, recordó la importancia de la buena gobernanza para la conservación. “El comité es una plataforma de articulación entre la sociedad civil y el Estado que cumple un rol esencial cuando en nuestras ANP se salvaguardan los medios de vida de los pueblos indígenas en situación de aislamiento”. “¿Cómo mejorar? Ese es nuestro desafío. Quizá la buena gobernanza en las ANP sea el camino, dando legitimidad y voz a quienes estamos en el territorio, sean pueblos indígenas, rurales o urbanos”.
Rimay fue una iniciativa impulsada por organizaciones aliadas como la Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), Naturaleza y Cultura Internacional (NCI), el Centro para el Desarrollo del Indígena Amazónico (CEDIA), la Sociedad Zoológica de Fráncfort Perú, el Instituto del Bien Común (IBC), The Nature Conservancy (TNC), Conservación Amazónica (ACCA) y el Instituto de Montaña. Rimay ha sido un espacio estratégico para visibilizar las experiencias y las oportunidades de mejora de los Comités de Gestión en el camino del cumplimiento de la meta 30×30.
Fotos: Wuilmar Briceño / SPDA